miércoles, 4 de abril de 2018

ENEAS.-


Arde Troya en la noche
entre gritos y sollozos de dolor.
Armas griegas que aniquilan almas,
que construyen caballos de destrucción.

Nacido del deseo humano de tu padre, Anquises,
del deseo de tu madre, Diosa del Amor.
Tu destino predestinado
a cumplir promesas,
a realizar sueños
en tierras por descubrir.

Atrás queda la sombra de tu amada
Creusa, convertida en ninfa,
atrás las ruínas de Troya,
atrás tantos héroes, tantas mujeres,
tantos ancianos,
tantos niños llorando.

Aguardan las naves, velas al viento.

Eneas, hijo de Venus,
da la mano a Anquises, tu hijo,
toma los objetos del culto troyano
y busca la tierra soñada: Hesperia.

Navegan vagando siete largos años,
arribando a tierras erradas
empujados por Dioses enfurecidos
y arropados por los brazos de las mujeres amadas.
Ya las dulces aguas del Tíber
se mezclan con la marina sal,
ya se rozan los pies con las arenas,
se intuye la tierra, se escucha la paz.

Eneas, hijo de Anquises,
deshiela la sangre de tus venas,
escupe la ira
y el vigor acallará las penas.-






miércoles, 14 de marzo de 2018


Catedrales de paredes robadas
se suman en el silencio
de los sotanos abandonados.

Invisible reposa el Arte.
Arte en femenino.

Dedos pigmentados en colores,
dedos acariciantes de pieles amadas.
Pasión en lienzos subyugados
de quienes nacieron para crear.

Desde el silencio de los sótanos ocultos
se alza un lamento.
Y multitudes se unen en palabras
llenando los vacíos huecos.-



martes, 27 de febrero de 2018

¡ TENÍAS QUE SER...

Se han colado los recuerdos por las rendijas
de las puertas abiertas de la memoria.
Hemos hablado en silencio,
rozándonos el alma.
No queremos ser.

Vamos bailando en sones discordantes,
como esa partícula de luz discontínua
que habita en líneas paralelas.
Al son de la música que suena,
movemos nuestros pies,
abrimos nuestra mente
repleta de quimeras,
nos llenamos de ruídos
nacidos en las afueras de las colmenas de nuestro amor.

Nos creemos princesas
en las torres de un cuento de nunca acabar.

Y, como siempre, en silencio
lavamos la culpa con pétalos de rosa,
tras los barrotes conglomerados
de humos que distorsionan la esencia.
La nuestra.

Mujer…
¡ Tenías que ser…




martes, 6 de febrero de 2018

VIEJITOS ENAMORADOS

Van de la mano.
Con la sonrisa descuidada
y los ojos chicos de haber visto tanto.
Van dando pasos cortos,
ya cansados,
pidiéndose permiso,
avanzando.

Él ya va un poco encorvado,
ella le abrocha un botón nacarado,
él le susurra palabras,
ella ya no le oye tanto.
Y ellos van de la mano,
por la vida, como antaño,
caminando, paso a paso.

Los viejitos enamorados.-



miércoles, 31 de enero de 2018

FILOMELA



Inundan los cielos los trinos de un ruiseñor,
mujer condenada al silencio.
Con hilos entrecruzados tejes palabras
mientras tus manos hablan, bordando
la túnica que lleva tu voz,
tu historia,
tu denuncia,
tu plegaria.
Engañada hizo de ti su esclava,
prisionera entre piedras ajadas,
retenida,
aislada,
violada.
De tu boca, la lengua arrancada,
en tu mente, la venganza clama,
y en tu cuerpo, la misma sangre de Tracia
de su mujer desposada.

Hombre cruel donde los haya,
hijo del Dios Ares, esposo de tu hermana.
Su propio engaño delató su crimen.
Envuelta en dádiva,
la historia narrada.

Son los ojos de tu hermana
ávidos de saber,
inundados en lágrimas.
No, no quiere creer.
No quiere desgarrar sus entrañas
ni despertar su ira agazapada.
Su mirada clama venganza.
Ida.
Loca.
Enajenada,
mata al fruto de sus entrañas.
Las viandas de su alma
servidas en plato de oro
al bárbaro de su cama.
Procne ¿Qué has hecho?
Itys ¿Dónde estás?

Inundan los cielos los trinos de un ruiseñor.
Los Dioses actúan.
Perseguidos por la abubilla,
vuelan eternamente el ruiseñor y la golondrina.



domingo, 14 de enero de 2018

TORMENTA DE MUJER.





La bautizaron antes de nacer.
Fue intuida antes de ser.

Apenas un punto cartográfico
de un porvenir explosivo,
sin predecir su fuerza ciclogenética
o los estragos de sus vientos,
con apenas el conocimiento de su núcleo,
ya fue guiada en su recorrido.

No contaron con los imprevistos.

Y hay coraje en un embrión de mujer,
a pesar de los miedos,
a pesar de los silencios.
Hay esa gota que siembra los sueños,
imparable entre los tiempos,
rebelde ante todo lo impuesto,
con piel manipulada
de tiernos sumisos dedos.

Ana, en femenino,
ciclogénesis explosiva.

Una entre tantas
                con nombre propio.
Desgarras el paisaje
                y lo reparas
cubriéndolo con besos de agua.-